Ante esa vastedad, buscamos consuelo en lo singular, aunque sea ilusorio. Las mentes colosales, autoorganizadas, nos inquietan precisamente por eso: porque son inasibles, impersonales, desbordantes.
Ufff. contundente!!!, inquietante!!! y también reconfortante!!!. La sensación que me deja esta reflexión es la misma que el relato de los peces y el agua de David Foster Wallace, donde como peces tenemos agencia, pero nos debemos a un entorno, que en gran parte nos es desconocido e invisible. También me recuerda un detalle que hablo en mis cursos, donde les dijo a mis alumnos de fisioterapia que me río de la palabra "prevención", porque no se ajusta a la realidad. Siempre prefiero hablar de "reducción del riesgo"; es decir, hablemos de probabilidades y no de conceptos absolutos o deterministas. Como siempre, un placer leer los contenidos que desarrollas, porque no sólo informas, comparas o criticas con argumentos, sino que nos abres ventanas a la autorreflexión. Un saludo y gracias.
Ufff. contundente!!!, inquietante!!! y también reconfortante!!!. La sensación que me deja esta reflexión es la misma que el relato de los peces y el agua de David Foster Wallace, donde como peces tenemos agencia, pero nos debemos a un entorno, que en gran parte nos es desconocido e invisible. También me recuerda un detalle que hablo en mis cursos, donde les dijo a mis alumnos de fisioterapia que me río de la palabra "prevención", porque no se ajusta a la realidad. Siempre prefiero hablar de "reducción del riesgo"; es decir, hablemos de probabilidades y no de conceptos absolutos o deterministas. Como siempre, un placer leer los contenidos que desarrollas, porque no sólo informas, comparas o criticas con argumentos, sino que nos abres ventanas a la autorreflexión. Un saludo y gracias.
Gracias, Jonatan. La reflexión de David Foster Wallace viene muy al pelo, sin duda