La Ilustración, conocida también como la Era de la Razón, fue un movimiento intelectual que dominó el mundo de las ideas en Europa durante el siglo XVIII. Se caracterizó por su énfasis en la razón, la ciencia, el respeto hacia la humanidad y la creencia en el progreso.
Sin embargo, el desarrollo y las implicaciones de la Ilustración no han sido uniformes a lo largo de la historia, conduciendo a lo que algunos consideran una "Segunda Ilustración" en tiempos más recientes, que se enfrenta a nuevos desafíos derivados de la complejidad de la sociedad moderna y el avance tecnológico.
Primera Ilustración
La Primera Ilustración se fundamentó en la creencia de que la razón humana podía ser utilizada para combatir la ignorancia, la superstición y la tiranía, así como construir un mundo mejor. Los ilustrados creían en la capacidad del conocimiento para mejorar la condición humana, enfatizando el poder de la ciencia y la lógica para revelar las verdades universales. Pensaban que la educación y el saber eran las llaves para el progreso y la emancipación individual y colectiva.
Esta era una época donde la suma de conocimientos era vista como algo positivamente acumulativo, donde cada nuevo descubrimiento científico o avance filosófico aportaba claridad y progreso a la sociedad en su conjunto.
Segunda Ilustración
En contraste, lo que podría llamarse la "Segunda Ilustración" aborda la complejidad emergente de la interconexión global y la sobreinformación. Reconoce que, si bien la acumulación de conocimiento y la expansión de la interconectividad tienen el potencial de conducir a la humanidad hacia adelante, también presentan desafíos sin precedentes que no fueron plenamente anticipados por los pensadores de la Primera Ilustración. Estos incluyen:
Intereses contradictorios: a diferencia de la noción de armonía universal de la Primera Ilustración, la Segunda Ilustración afronta la realidad de que los intereses individuales y colectivos a menudo entran en conflicto de maneras complejas, cancelándose entre sí en lugar de sumarse armoniosamente.
Sobrecarga de información: el aumento exponencial de la información disponible no siempre conduce a una mayor comprensión. En cambio, a menudo resulta en confusión y dificultad para discernir qué información es valiosa o verdadera, un fenómeno ausente en la era de la Primera Ilustración.
Consecuencias imprevistas de decisiones racionales: las decisiones basadas en la razón individual pueden tener consecuencias desastrosas en sistemas interconectados complejos, donde una acción lógica en un contexto puede desencadenar efectos indeseados en otro.
Crítica de la razón instrumental: una crítica a la idea de que la razón y la ciencia deben servir exclusivamente a fines utilitarios o instrumentales, defendiendo en cambio una concepción más holística de la racionalidad que incluya dimensiones éticas y estéticas.
Una nueva filosofía política
Esta segunda Ilustración también debería impregnar la epistemología política.
La transición hacia una política de la complejidad implica, fundamentalmente, reconsiderar y rediseñar las estructuras y procesos por los que nuestras sociedades se gobiernan, educan, y organizan el conocimiento. Esta reconceptualización se basa en el reconocimiento de la interdependencia, la no linealidad, y la capacidad de adaptación como características esenciales de los sistemas complejos, incluidos los sistemas sociales. Veamos en detalle cómo estas implicaciones pueden manifestarse en diversas áreas:
Gobernanza distribuida: donde el poder y la toma de decisiones se distribuyen más ampliamente entre diferentes actores y niveles, permitiendo respuestas más rápidas y adaptadas localmente a los desafíos.
Crowd wisdom: la sabiduría de la multitud se refiere a la idea de que las decisiones o predicciones colectivas de un gran grupo de personas tienden a ser más precisas que las de un individuo experto
Sistemas adaptativos complejos: los sistemas de gobernanza que aprenden y evolucionan con el tiempo, adaptándose a las condiciones cambiantes mediante la retroalimentación continua y la iteración.
Paternalismo libertario: un enfoque que busca influir en las decisiones de las personas hacia resultados más beneficiosos para ellas mediante nudges o empujoncitos, permitiendo al mismo tiempo la libertad de elección.
Participación ciudadana ampliada: utilizar tecnologías digitales para involucrar a los ciudadanos de manera más directa y significativa en el proceso político, aprovechando la inteligencia colectiva para la toma de decisiones.
Democracia líquida: sistema de toma de decisiones que combina elementos de la democracia directa y la representativa, permitiendo a los participantes votar directamente sobre asuntos o delegar sus votos en representantes de su elección.
Nuevas Formas de Orquestación Cognitiva
Este concepto se refiere a cómo las sociedades organizan y aplican el conocimiento colectivo para abordar desafíos complejos. Implica:
Colaboración multidisciplinaria: fomentar la colaboración entre personas de diferentes campos del saber para generar soluciones innovadoras a problemas complejos. El Proyecto del Genoma Humano es un claro ejemplo de colaboración multidisciplinaria. Este esfuerzo global involucró a biólogos, químicos, físicos, ingenieros informáticos y expertos en ética trabajando juntos para mapear todos los genes de los seres humanos. La diversidad de conocimientos permitió no solo decodificar la secuencia genética humana, sino también abordar las implicaciones éticas, legales y sociales de los descubrimientos genómicos.
Inteligencia colectiva y crowdsourcing: aprovechar la sabiduría y el conocimiento dispersos en la población, utilizando plataformas digitales para recopilar y analizar grandes volúmenes de ideas y soluciones. Wikipedia es uno de los ejemplos más notables de inteligencia colectiva y crowdsourcing. Este proyecto de enciclopedia en línea permite a cualquier persona con acceso a Internet contribuir con contenido, editar y revisar artículos. A través de la colaboración masiva, Wikipedia ha logrado compilar una vasta cantidad de conocimiento, abarcando desde temas generales hasta áreas muy especializadas del saber, y se actualiza constantemente para reflejar nueva información y correcciones.
Tecnologías cognitivas avanzadas: implementar tecnologías como la inteligencia artificial y la analítica de datos para mejorar la capacidad de análisis y predicción, apoyando la toma de decisiones basada en evidencia. IBM Watson Health representa un uso avanzado de tecnologías cognitivas aplicadas al campo de la salud. Watson es un sistema de inteligencia artificial que puede procesar y analizar grandes volúmenes de datos de investigación médica, historiales de pacientes y literatura científica para ayudar en el diagnóstico y recomendación de tratamientos.
Estas nuevas formas de gobierno y orquestación cognitiva no solo son respuestas a la complejidad de los sistemas sociales modernos, sino que también representan un cambio paradigmático en cómo entendemos y nos relacionamos con el mundo. Al adoptar enfoques que valoran la adaptabilidad, la interconexión y la co-creación es posible abordar de manera más efectiva los desafíos emergentes, desde el cambio climático hasta la desigualdad social y la innovación tecnológica.
Nadie nos garantiza que funcione, ni siquiera que las cosas mejoren. Pero, al menos, podemos intentarlo.
¿Así que Watson? (je, je, je). Me ha gustado mucho el artículo.
Muy interesante reflexión.
A veces pienso que los desafíos que enfrentamos en la era moderna, como la sobrecarga de información, no son fundamentalmente diferentes de los que enfrentaron los pensadores de la Ilustración. Por ejemplo, la imprenta ya había llevado a una sobrecarga de información.
Sobre los "intereses contradictorios", no hay que olvidar que la Ilustración fue una "transición" hacia la Modernidad, que es donde se asentaron los tópicos que comentas (pero no "técnicamente" en la Ilustración). Por ejemplo, eso que comentas sobre la "crítica de la razón instrumental" fue algo propio de la Modernidad y no de la Ilustración.